Brasil ha vuelto a escribir un nuevo capítulo en su historia en la gimnasia rítmica. Tras conquistar el inédito bronce en la prueba general en una etapa de la Copa del Mundo en marzo, la selección brasileña consiguió este domingo su primer oro en la competición. Giovanna Silva, Maria Eduarda Arakaki, Nicole Pircio, Sofia Madeira y Victoria Borges se llevaron el título de los cinco arcos del Challenge de Portimão, en Portugal.
Al son de “I Wanna Dance With Somebody”, un clásico de Whitney Houston, las brasileñas prácticamente clavaron la serie de la final de este domingo. Consiguieron todas las colaboraciones de dispositivos a la derecha y a la izquierda de la cancha celebrando. Al ver la puntuación de 34.600 puntos, las gimnastas se emocionaron mucho. El marcador dejaba atrás a España (34.450) e Italia (33.800), medallistas en la prueba de 5 aros del Mundial del año pasado.
– Estamos muy contentos y satisfechos de poder completar nuestra serie en este último día. Muchas gracias por la afición y volver al trabajo para los próximos goles – dijo Duda Arakaki, recordando que Brasil buscará una vacante olímpica en el Mundial de Valencia, en España, en agosto.
La medalla de oro de este domingo es una remontada después de dos días de demostraciones con pequeños huecos en las rondas de clasificación. Brasil fue apenas el séptimo equipo en los 5 aros (30.550) y quedó décimo en el evento mixto de cintas y bolas (23.200), quedando fuera de la decisión por aparatos. En la general, que es la prueba olímpica, Brasil quedó en el octavo lugar, sumando 53.750 puntos.
En las pruebas individuales, Geovanna Santos compitió en la final de la cinta este domingo y terminó en el sexto lugar, con 28.400 puntos al son de “Rajadão”, golpeado por Pabllo Vittar. La gimnasta repitió el puesto de clasificación, cuando sumó 28.450 puntos. Ocupó el puesto 13 en la general, que es la prueba olímpica, con 110.600 puntos (28.850 en aro, 25.650 en pelota, 27.650 en mazas y 28.450 en cinta).